Ir al contenido principal

Entradas

Destacado

Cuarta parte: La merienda y los recuerdos

  Mi familia seguía desconociendo la existencia de mi nuevo amigo pero creía que si les hablaba sobre el iban a tomarme por loco. El sujeto y todo lo que lo rodea no era convencional y explicarlo requería un esfuerzo que no quería hacer. En esta ocasión hice la tarea con tiempo de anticipación, lleve el cuaderno conmigo y escribí las rarezas del día mientras mi ayudante almorzaba en su casa, la última entrega de la mañana era una carga pequeña y deje que el joven trabajador pase tiempo con su familia, se merecía descansar. El chico me vio sacar a la perrita del camión y naturalmente pregunto, a lo que yo respondí que se trataba de una sorpresa para un amigo, que había encontrado al animalito en la calle la noche anterior y lo deje en el vehículo para que mis hijos no se encariñen. Él había tenido consultas con el medico en la tarde anterior y lo creyó. Las rarezas no se diferenciaban mucho de las otras, excepto una todas las demás   giraban en torno a la naturaleza. Una de ellas se p

Últimas entradas

Tercera parte: El pasado si puede volver

Segunda parte: El maravilloso Doctor Multifunción

Primera parte: Horacio, un hombre normal

La maldición de los héroes

Extensiones

Decima parte: Daniel Ivanov, el nuevo pueblerino.

Novena parte: Los años futuros

Octava parte: La tinta del destino

Septima parte: Secretos en las paredes

Sexta parte: Las tres luces de la felicidad