Novena parte: Los años futuros
Si una historia tan breve y sencilla pudo atraer a un extraño encantador la magia que Damien mencionaba existía. Guillermina estuvo parte de la tarde escribiendo una nueva historia que cambie la vida de su amigo invisible. En una agenda vieja apunto las ideas que surgían y recién anoto la narración definitiva cuando estuvo segura, desperdiciar tinta especial no era una opción. Era corta y simple como las anteriores:
“En un pueblo
lejano los rumores sobraban. Cada miembro de la comunidad era el protagonista
de alguno, la peor parte de vivir en ese lugar era
ser un objeto para evitar el aburrimiento ajeno. El pueblerino más castigado
por los chismosos se llamaba Damien Nicolino Azar. Su timidez y su tristeza eran
dos actrices que se peleaban por el papel principal de la obra y vivir en paz
no era una opción posible.
El hombre era
guionista y trabajaba en su casa. Su jefe producía series que alcanzaban la
popularidad rápidamente, cuyos guiones eran premiados todos los años. El
productor mantenía oculta la imagen de su escritor estrella, se sentía tan
afortunado de haberlo encontrado que prefería invisibilizar su presencia y
esconderlo en la mansión más hermosa de aquel pueblo lejano. Ningún productor o
director se dirigiría a ese sitio olvidado.
Damien fue su
fiel empleado por varias décadas. El día llegaría y su jefe lo sabía, la jaula
de oro asfixiaba al muchacho y empezó a hartarse. Necesitaba ser libre de nuevo
y afrontar sus temores por primera vez en su vida, el encierro lujoso lo mataba
por dentro cada día. En el pueblo decían cualquier tipo de tontería, “se volvió
loco cuando murió su madre”, “falleció y
su cadáver sigue dentro de la mansión”, “vive en otro país y su madre muerta es el fantasma que habita la casona”, etc.
El joven oía esos delirios y se indignaba,
esa gente dedicaba más tiempo a la vida ajena que a la propia. Cansado de
soportar la estupidez de su comunidad salió de su mansión y les demostró a
todos que estaba vivo, que sus miedos lo habían encerrado, que se sentía lo
suficientemente mal por ello y tener que oír sus estupideces todo el tiempo era
demasiado. Expresar sus sentimientos lo libero y la capa de invisibilidad que
lo cubría desapareció. Decidió mudarse a la ciudad y trabajar por su cuenta, y no
le importó que su jefe no estuviera de acuerdo. Tomó las riendas de su vida y escribió
su propio futuro.
Desde entonces
es un hombre libre. Trabaja para varios directores y productores y publica libros. Vive sin miedo y ve el sol
cada día, pisoteó su jaula y la desecho para siempre. Su ex jefe no tolera su
libertad y odia verlo tan feliz, ahora el invisible es él.
El mundo es tuyo
Damien, te mereces lo mejor de la vida y
me hace feliz que tu maravillosa forma de ser sea visible para todos.Tu reflejo
en el espejo se ve espectacular, yo lo imagino ahora pero vos lo veras mañana. El
mundo te extrañaba, que lindo es verte regresar.”
Se fue a
descansar feliz y confiada. Sus intenciones eran buenas y se sentía segura, la
magia serviría, la había guionado. Los mensajes de Guido eran hermosos y una
sonrisa se instaló en su cara. Los años futuros de Damien y los de ella serian
mejores que los resultados de la mismísima creatividad.
El joven de 110
años amaneció como siempre, se vistió, le abrió la puerta del jardín a Bere y
se dirigió a la cocina. Al tomar una taza observo una mano visible, una mano
que recordaba, su propia mano. Pensó que estaba loco, subió las escaleras y se
puso frente al primer espejo que encontró. Su cara ovalada, sus rizos y sus
ojos verdes eran visibles, no sabía que estaba pasando. Su apariencia exterior había
regresado ochenta años después. Fue imposible no ponerse a llorar, se sentía un
ser humano de nuevo y no era un sueño, la realidad lo mostraba.
Guillermina y Boris
casi se desmayan, un joven delgado y alto les abrió la puerta.
-¡Sos vos! Me
hace feliz poder verte Damien, guionar la magia me salió bien!
-¿Fue usted Mina?
¿Cómo lo hizo? Escribí mis deseos con mi pluma especial durante años y nunca obtuve
resultado, ¿puedo abrazarla? Estoy muy feliz.
-Escribí un
pequeño relato sobre vos en el cuaderno dorado, lo traje para que puedas
leerlo.
El joven lo leyó
y se emocionó, todo lo que esperaba lograr estaba escrito allí. Esa adolescente
maravillosa lo había salvado. Sentía la libertad en su corazón y tenía ganas de
sonreírla mañana soleada le daba vida y energía para salir al mundo. Idearía un
plan para no confundir a los pocos habitantes longevos que podrían reconocerlo
y cambiaría de ropa y de aspecto. Guillermina iba a ayudarlo, el futuro lo
esperaba y estaba emocionado.
La amistad mueve los obstáculos más grandes, es la muestra de amor más hermosa que este mundo ha visto nacer. Un amigo de verdad puede cambiar tu vida.
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